23:42 UN DIGNO SUBCAMPEÓN

Vélez le ganó 2-0 a Racing, con goles de Juan Manuel Martínez y Maximiliano Moralez, en el Estadio Juan Domingo Perón. Sin embargo, como consecuencia del triunfo pincha en la cancha de Quilmes, se quedó con las ganas de jugar una final o gritar “dale campeón”.
El marco en la previa era impresionante. Muchísimos hinchas de Racing se acercaron a la cancha a pesar de no tener ningún objetivo concreto, y como era de esperar todo el sector fortinero desbordaba con la ilusión de arrebatarle el titulo a Estudiantes. Para alimentar ese sueño, casi todos los simpatizantes velezanos llevaban una radio encima, porque su principal preocupación era lo que sucedía en las tierras cerveceras.
No obstante, en Avellaneda hubo un partido de fútbol interesante, ya que dejó muchas cosas para analizar. El dominio claramente estuvo a cargo del conjunto dirigido por Ricardo Gareca, que tal vez hizo el mejor primer tiempo de todo el torneo. Con un tridente de ataque muy inspirado, que contó con espacios para conectarse, en 25 minutos Vélez generó más de cinco situaciones claras de gol. La más importante, que terminó en el fondo del arco, fue creada pura y exclusivamente por el “Burrito”, quien arrancó desde su campo, y en una apilada fenomenal de izquierda a derecha llegó mano a mano con De Olivera para definirle por abajo. La hinchada visitante deliró, algunos periodistas en el sector de prensa se animaron a comparar el gol con el Maradona a los ingles, pero lo cierto es que a partir de ahí la atención de los espectadores se volcó definitivamente en el partido de Estudiantes.
De todos modos, la academia intentaba seguir adelante con su plan: ganarle la espalda a Emiliano Papa, ubicando en ese sector Gio Moreno o Gabriel Hauche. Sin embargo, todo fue en vano. En el primer tiempo, Vélez fue mucho para un equipo que todavía sigue en formación.
La segunda mitad del partido estuvo aún más teñida con eso de prestar atención en el partido del puntero del campeonato. Ya el juego no contaba con el mismo vértigo que en los primero 45 minutos. El fortín dominaba pero no era tan profundo, porque no lo necesitaba. Sin embargo, el uruguayo Santiago Silva, gran figura del torneo, fabricó un tiro libre cuando iban poco más de diez minutos. Moralez, que tuvo una tarde intratable para los rivales, se hizo cargo de la ejecución, y la colgó del ángulo derecho del arquero racinguista.
Así, en el cilindro, el resultado había quedado sellado, solo era tiempo de esperar y confiar en los muchachos de Gustavo Alfaro. No obstante, la peor noticia se escucho por radio. Dos goles del pincha, y la celebración de los hinchas académicos, le cambiaron el semblante a las caras de los simpatizantes y jugadores velezanos.
El titulo ya es historia, el campeonato quedó para Estudiantes, pero el equipo de Gareca es un digno subcampeón.

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