De la mano de la gran figura del encuentro, el colombiano Marco Pérez, quien convirtió dos golazos, Gimnasia de La Plata derrotó por 3 a 1 a un Atlético Rafaela que cumplió un gran papel y terminó jugando con ocho jugadores.
No tenía nada fácil las cosas el equipo platense, porque comenzaba con una derrota por 1 a 0 en el partido de la ida y aún recordaba lo complicado que había sido mantener la categoría hace un año atrás nada menos que frente al mismo rival.
Pero la alegría y tranquilidad llegó de manera muy rápida ya que a los 3 minutos, en la primera pelota que recibió el moreno Pérez, encaró y dejó a su marcador muy atrás y definió de manera magistral frente a la salida de Airaudo que nada pudo hacer para que la pelota toque la red. El delirio en la Plata ya se vivía desde temprano.
Con el gol a su favor y la tranquilidad de jugar con la ventaja deportiva que le permitía quedarse en Primera con un empate global, hizo que los jugadores puedan circular mejor la pelota y hasta contar con algunas ocasiones más de gol. Pero la sorpresa llegó a los 19 minutos de la primera parte, donde Carniello logró conectar el empate de cabeza tras un centro desde la izquierda y una salida en falso del arquero Gastón Sessa. El silencio sentenció por minutos el estadio del bosque porque con este resultado el que jugaba en Primera era Atlético Rafaela.
Pero antes de llegar al descanso una falta que provocó la primera expulsión en la crema hizo que Walter Serrano tuviera que dejar la cancha a los 41 minutos por cometer una fuerte infracción cerca del área grande. Marco Pérez fue quien se encargó de tomar la pelota y prácticamente clavarla en el ángulo derecho del arquero con un estupendo pelotazo que lo dejo inmóvil al arquero de Rafaela. Gimnasia se iba al descanso con la tranquilidad de la victoria parcial.
En la segunda parte los dirigidos por Diego Cocca buscaron definir el partido y trataron de jugar en el campo adversario, pero por momentos tuvieron que replegarse atrás cuando la visita intentaba llegar al arco de Sessa con pelotazos frontales. Las cosas se le hicieron mas fáciles al Lobo cuando a los 39 minutos del complemento Walter Serrano debió dejar la cancha tras ser expulsado por el árbitro del encuentro, Rafael Furchi. El equipo santafesino apostaba a buscar el empate con pelotazos y desniveles que nunca llegaron más allá de dos buenas intervenciones del arquero tripero. Y peor suerte correría el equipo dirigido por Carlos Trullet, cuando en una jugada desafortunada fue lesionado con un corte en su cara el arquero Airaudo quien debió ser llevado en ambulancia hacia el hospital. Atlético de Rafaela se quedaba con ocho jugadores y uno de ellos debió encargarse de la portería debido a que no tenía más cambios. Bovaglio debió ocuparse de la difícil tarea de mantener el arco sin otro gol para mantener las esperanzas y fue al final donde el chileno Ormeño entró al área, eludió al arquero de turno y selló las cosas poniendo el 3 a 1 definitivo. La fiesta fue total en el bosque y Gimnasia respira al menos por un año más.
No tenía nada fácil las cosas el equipo platense, porque comenzaba con una derrota por 1 a 0 en el partido de la ida y aún recordaba lo complicado que había sido mantener la categoría hace un año atrás nada menos que frente al mismo rival.
Pero la alegría y tranquilidad llegó de manera muy rápida ya que a los 3 minutos, en la primera pelota que recibió el moreno Pérez, encaró y dejó a su marcador muy atrás y definió de manera magistral frente a la salida de Airaudo que nada pudo hacer para que la pelota toque la red. El delirio en la Plata ya se vivía desde temprano.
Con el gol a su favor y la tranquilidad de jugar con la ventaja deportiva que le permitía quedarse en Primera con un empate global, hizo que los jugadores puedan circular mejor la pelota y hasta contar con algunas ocasiones más de gol. Pero la sorpresa llegó a los 19 minutos de la primera parte, donde Carniello logró conectar el empate de cabeza tras un centro desde la izquierda y una salida en falso del arquero Gastón Sessa. El silencio sentenció por minutos el estadio del bosque porque con este resultado el que jugaba en Primera era Atlético Rafaela.
Pero antes de llegar al descanso una falta que provocó la primera expulsión en la crema hizo que Walter Serrano tuviera que dejar la cancha a los 41 minutos por cometer una fuerte infracción cerca del área grande. Marco Pérez fue quien se encargó de tomar la pelota y prácticamente clavarla en el ángulo derecho del arquero con un estupendo pelotazo que lo dejo inmóvil al arquero de Rafaela. Gimnasia se iba al descanso con la tranquilidad de la victoria parcial.
En la segunda parte los dirigidos por Diego Cocca buscaron definir el partido y trataron de jugar en el campo adversario, pero por momentos tuvieron que replegarse atrás cuando la visita intentaba llegar al arco de Sessa con pelotazos frontales. Las cosas se le hicieron mas fáciles al Lobo cuando a los 39 minutos del complemento Walter Serrano debió dejar la cancha tras ser expulsado por el árbitro del encuentro, Rafael Furchi. El equipo santafesino apostaba a buscar el empate con pelotazos y desniveles que nunca llegaron más allá de dos buenas intervenciones del arquero tripero. Y peor suerte correría el equipo dirigido por Carlos Trullet, cuando en una jugada desafortunada fue lesionado con un corte en su cara el arquero Airaudo quien debió ser llevado en ambulancia hacia el hospital. Atlético de Rafaela se quedaba con ocho jugadores y uno de ellos debió encargarse de la portería debido a que no tenía más cambios. Bovaglio debió ocuparse de la difícil tarea de mantener el arco sin otro gol para mantener las esperanzas y fue al final donde el chileno Ormeño entró al área, eludió al arquero de turno y selló las cosas poniendo el 3 a 1 definitivo. La fiesta fue total en el bosque y Gimnasia respira al menos por un año más.
Pablo Lucas Candelaresi
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