Otra vez a lo Messi. A 40 metros inició su empresa. Del centro hacia adelante, fue acariciando con su zurda la globa, y a la vez deshaciéndose de las oposiciones de amarillo con tanta facilidad. Ya en la puerta del área, otro brasilero desparramado y, cuando salía Gabriel al bulto, el torero culminó su faena con la última estocada. Co un touch de gloria del pibe Iturbe, la Argentina, que salió a cuidar los papeles de arranque, aprovechó cualitativamente las pocas chances que tuvo ante un Brasil nervioso por el comienzo.En la primera jugada, el capitán brasilero Bruno Uvini, trabó con Adrián Martínez y salió lastimado. Y a los 5, el otro central, Juan, conectó a Funes Mori en la marca tras un córner, y el árbitro colombiano Wilmer Roldán pitó penal y lo expulsó. El propio delantero se encargó de fusilar a Gabriel, seco y al medio, para abrir el marcador.
Tantos contratiempos juntos pusieron a todos los garotos con los pelos bien de punta –estilo Neymar-. Pero es Brasil, y saben. Por eso, y de antemano, Perazzo planteaba batalla. Reforzando los carriles para no sufrir las subidas de los lateral, y siempre terminar marcando escalonados a un Neymar fastidioso y bastante discutidor.
El partido estaba planteado. Con la Canarinha yendo, por necesidad y urgencia, haciendo uso de la posesión del balón y también del terreno, pero el buen repliegue y la compresión del os pibes argentinos, obligaban a tener ingenio y raciocinio para encontrar espacios de 3 cuartos hacia delante.
En el complemento, Brasil salió a no especular, volcándose de lleno al ataque. Con ambos laterales pisando tierra nacional, y dándole más participación activa al número 10, Lucas, que cada vez que encaró, tuvo facilidad para la gambeta. A los 9, de un lateral, Neymar tocó en corto para el grandote William, que salió del área y, desenfundó un potente remate que se le fue abriendo a Andrada, y Brasil llegaba a la igualdad.
Tras la fugaz pero concreta aparición de Iturbe, y con el ingreso de Cirigliano y Mauro Díaz, la Argentina se adelantó unos metros en el campo y logró sostener con mayor criterio el balón. Con esta victoria, los pibes quedaron 2 segundos junto a la Verde Amarela, con 6 unidades. Primero está la Celeste uruguaya, y el miércoles justo se enfrentarán, en un partido clave para asegurarse una de las dos plazas para defender el bicampeonato en Londres 2012.
IVÁN ISOLANI
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