15:47 EL CALOR LO PONE EL CANAYA



Una victoria de ilimitada magnitud. 3 puntos, nada más. Pero por el desarrollo del encuentro, por la rápida expulsión de Ballini, por el calor que obligó a sacar energías y a extremar esfuerzos para no dejar rengo al equipo, hicieron que este 1 a 0 en el Ducó, le dé la pauta a Rosario Central que está para pelear cosas importantes. El incansable Gonzalo Castrillejos, aprovechando un error grosero en la salida del arquero Monzón, permitió que el Canaya
quedara bien cerca del lote de punteros.
Un partido chivo para ambos. Porque Huracán trata de imponer su juego, con volantes de buen toque y mucha habilidad. Central salió a repeler esa buena posesión, y a disputársela, con la presencia de Rivero para tratar de hacerse eje en a espaldas del negro Leiva y explotar el buen momento de Medina y de Castrillejos.
Demasiado temprano, los planes cambiaron radicalmente. Una plancha brutal de Ballini sobre Battaglia dejó a la Academia con uno menos. Mucho tiempo para tener que desgastar la máquina y tratar de que el calor y la alta temperatura no sopese en el rendimiento.
A los 29’, cuando los hombres del fondo Quemero estaban aprontándose para atacar, Monzón intentó salir con la mano para la izquierda, con tal error que rebotó en Castrillejos que estaba merodeando por ahí, y con una dosis grande de fortuna, la definición algo mordida del goleador, superó la estirada del arquero y la posición de Filipetto en la línea del arco, que le pifió y permitió que el compendio de errores se cerrara con moño y todo.
Encima, a los 33 minutos, el propio Filipetto empardó las acciones yéndose expulsado por doble amarilla. 10 contra 10, las necesidades obligaron al conjunto de Parque Patricios a tener que aunar esfuerzos para buscar la igualdad. Y a desprotegerse atrás, dejando espacios para que la velocidad de Medina y la picardía de Castrillejos complicara a la línea de 3 que improvisaba Cocca en el fondo.
Central resistió, por malas definiciones de los delanteros Quemeros, y por las buenas intervenciones del melli García. En tanto Huracán, finalizó con más dudas que certezas.


IVÁN ISOLANI