16:35 DE LA MANO DE RAFA, ESPAÑA SE CORONÓ CAMPEÓN POR QUINTA VEZ













Rafael Nadal se impuso al argentino Juan Martín Del Potro por 1-6, 6-4, 6-1 y 7-6 (0) en cuatro horas y siete minutos, pero en la primera manga, en los inicios de la segunda y en el cuarto y definitivo set sufrió bastante ante el argentino, aunque el español, sobre tierra, siempre aguanta hasta la extenuación y hoy volvió a demostrarlo para darle a su país su quinta Ensaladera de Plata.
La Torre de Tandil empezó el partido con malos augurios, al servir en el juego inaugural y perderlo tras cometer dos dobles faltas consecutivas, pero de ahí hasta el final del primer set todo le fue favorable.
 Juan Martín del Potro tenía la responsabilidad de vencer al número dos del mundo para mantener viva la esperanza y dio todo su tenis sobre la cancha de Sevilla, pero Rafael Nadal acabó por derrotarlo y  cerró el triunfo para España y Argentina perdió su cuarta final de la Copa Davis.
Del Potro ya no perdió más su saque, el primero siempre muy potente y que le daba dominio en el punto, y cuando le tocó restar estuvo concentrado en poner bolas muy al fondo que el mallorquín no supo responder.
Nadal no ganó ninguno de los tres juegos en los que sirvió y el argentino se llevó la manga por un claro 6-1 y con la sensación de que el adversario jugó a la defensiva.
El segundo set empezó igual. Del Potro volvió a romperle el saque al español, además con juego en blanco, y sumó siete consecutivos ganadores, algo nunca imaginado ante el mejor jugador en tierra del mundo.
En el segundo juego de esta manga llegó el punto de inflexión, cuando el argentino perdió su segundo saque hasta el momento y después Nadal ganó también su primer servicio.
El español se puso otra vez por delante desde el 1-0 del primer set y se vio un partido más igualado, pues Nadal estuvo más confiado en el saque y eso hizo que el tandilense no llevara la iniciativa, hasta el punto que su rival no desperdició la primera bola de set de la que gozó en el décimo juego y se adjudicó la manga por 6-4 cuando se cumplía dos horas de partido.
Empezó entonces un nuevo choque, éste al mejor de tres sets, pero con la incertidumbre de saber quién iba a estar más desgastado, Del Potro, que jugó dos días antes un choque de cerca de cinco horas ante David Ferrer, o Nadal, tocado físicamente por su agotadora temporada.
Fue el español el que estuvo mejor mentalmente y por momentos el argentino perdió fuelle e ideas y más cuando a las primeras de cambio Nadal se puso con un 3-0 a su favor.
El número dos del mundo le devolvió al undécimo el 6-1 de la primera manga y también la impresión de que estaba mucho mejor preparado para el cuarto set.
Del Potro, pese a ello, no se dio por vencido y, tras perder su servicio en el primero, lo recuperó en el cuarto e igualó la manga al volver a entrarle grandes golpes que hicieron mella por momentos en el rendimiento de Nadal.
El argentino llegó a tener el set en su mano con un 5-4 para forzar la quinta manga, pero Nadal reaccionó en el momento oportuno para los intereses de España y forzó una muerte súbita en la que ya no tuvo piedad y se la llevó por 7-0.
Nadal, a la conclusión del choque, se mostró muy feliz por el logro "en un año complicado" pero también "espectacular" con este partido.
Se acordó de todos sus compañeros de equipo, al recordar que ganaron en Austin a Estados Unidos sin que él estuviera presente en esa eliminatoria.
 "La verdad es que estoy muy contento por el triunfo, aunque lo siento por Juan Martín, que jugó un partidazo. Es un rival de grandísimo nivel y estará entre los mejores por mucho tiempo porque es un jugadorazo", destacó el número 2 del mundo, que tras la victoria se acercó al equipo argentino y saludó a cada uno de sus integrantes.
Luego, reconoció la importancia de ganar esta copa para cerrar una temporada que lo tuvo a maltraer: "Ha sido un año no muy bueno. He perdido muchas finales y esta era la última oportunidad para terminar el año con una alegría", confesó Rafa, que sufrió con el extraordinario 2011 del serbio Novak Djokovic, quien lo venció en seis finales.
Acerca del partido en sí, Nadal analizó: "Son partidos de muchos nervios. Al comienzo él me dominó claramente. Pero el arranque del segundo set fue vital, porque remontar aquel 0-1 me devolvió la vida. El tercer set lo jugué muy concentrado y el cuarto set fue a lo que pueda pasar, y por suerte se me dio."