22:35 EL ROJO SE ALEJA DEL SUEÑO COPERO


Independiente fue a su renovado estadio con la idea de quedarse con tres puntos de oro que le permitan seguir a tiro de la clasificación a la Libertadores pero pecó de ineficacia a la hora de definir, no tuvo demasiadas variantes para quebrar a los rosarinos y finalmente tuvo que conformarse con un 1-1 con sabor a poco. Newells, por su parte, sigue sin ganar y se acerca cada vez más a la zona roja de los promedios.
El uno del Rojo, Adrián Gabbarini, rápidamente fue exigido apenas corrido algunos minutos de inicio del encuentro y para suerte del local el arquero del equipo de Avellaneda desactivó bien una peligrosa alarma encendida a raíz de un error defensivo por parte de Julián Velázquez. El elenco de Ramón Díaz tenía la posesión de la pelota, la iniciativa en el ataque pero nunca pudo trasladar ese predominio al marcador y para peor constantemente le dejaba largo terreno a los rosarinos para el contragolpe.
Finalmente a los 17 minutos del primer tramo se abrió el marcador a favor del conjunto de Diego Cagna a través del tanto de Pablo Pérez quien supo aprovecharse de un mal rechazo del Avispa Velázquez para luego rematar fuerte sobre un desacomodado Gabbarini. Como era de esperarse el equipo visitante se refugió aún más en su campo tras el gol y fue allí donde el Rojo apretó y comenzó a hacer todo para merecer el empate. En uno de dichos intentos Maxi Velázquez estrelló un cabezazo en el travesaño y luego increíblemente el otro Velázquez remató alto y afuera desde el área chica y con el balón regalado en sus pies.
El Pelado Díaz metió mano en el banco de suplentes y decidió meter a Patricio Rodríguez y Hernán Fredes para el complemento en busca de mayor volumen de juego de mitad de cancha hacia adelante. Rápidamente dicha idea tuvo resultados inmediatos: sobre el minuto 17 y tras una buena jugada entre el Patito y Martin Benítez el propio joven delantero remató con violencia con su derecha y puso la merecida igualdad para Independiente.
Tras el tanto del empate el Rojo fue aun con más vehemencia en busca de torcer la historia pero no tuvo demasiadas variantes y para peor cada tanto se encontraba con un algún sacudón rosarino de contraataque. Independiente siguió con el dominio de juego pero su agresividad poco a poco se fue perdiendo y como lo pudo haber ganado también lo pudo haber perdido. Por el lado del local tuvieron su chance para ganarlo Gabriel Valles y Brian Nieva mientras que la visita sobre el final pudo haber definido el encuentro a través de alguna contra perdida que logró sacar.
Finalmente el equipo de Avellaneda se tuvo que conformar con un triste empate que claramente le cae mejor a Newells, ahora deberá esperar por lo que haga Tigre frente a San Lorenzo: si gana el de Victoria se aleja un poco más y si pierde le permite al Rojo seguir a tiro.




CRISTINA LA ROSA